lunes, 28 de octubre de 2013

Esto y más soy...

Por Mireya Cerrillo.

Reconozco que soy mis tristezas y mis nostalgias.
Mis confusiones y desolaciones.
Soy una risa a carcajadas.
Incertezas y tantas frustraciones.

Soy una y mil ideas:
estrambóticas todas resuenan en mi cabeza.
Soy todas mis desilusiones.
Sobretodo soy el despertar de mis ilusiones.

Y soy mis ganas y mi impaciencia.
Las noches de desvelo y arrebato.
Soy esta terrible ausencia.
Los días que le reclamo al tiempo ingrato.

Y soy mis raíces y mis ramas.
Mis poesías y mis letras.
Mis reflexiones y silencios.
Soy dueña de lo que no sentencio.

Soy tantos lugares y soy mi tierra.
Soy sueños y agonías.
Mis realidades con sus ironías.
Tantos mundos, mis batallas y mis guerras.

Soy tanto. Soy nada.
Soy un momento en este instante.
Abrumada y con una historia apasionante,
viajante, brillante, hilarante… distante.

Soy un desastre, soy un desmadre.
Soy una farsante, una pasante
de este mundo agobiante.
Barullo en cuerpo y mente.

Amante de lo que me acongoja.
Así, triste es cuando mejor escribo:
lo que de mi piel aflora, lo que se me antoja.
Te añoro. Y me lo prohíbo.

Soy lluvia y soy tormenta.
El suspiro que alimenta mis recuerdos.
La que sus sentimientos niega, olvida y aleja.
Soy un río que fluye al interior de lo que pierdo.

Soy un ciego y loco corazón:
que vibra, que siente, que ríe y que llora.
La constante búsqueda de la razón:
que explota y se ahoga.

Toda esta melancolía.
Fruto de la monotonía.
¿Alguna vez seré todo lo que quiero ser?
No sé. Mientras tanto soy mis manías,
capaz de ganar y de perder.

Aprendiz del ayer.
Soy simplemente…esta mujer.
La que no se cansa de dar y de querer.
Maestra del ser y no ser.


lunes, 21 de octubre de 2013

La risa...

"La risa es el sol que ahuyenta el invierno del rostro humano" -Victor Hugo-

Por Mireya Cerrillo.

Existe algo que me tranquiliza así sin más, así sin prisa.
Algo que me protege del mundo y sus ironías.
Es reír de nervios o a risotadas:
el lenguaje de mi alma atormentada.

Reír cómicamente y burlarme de mi suerte.
Hacer un chiste en el momento y adueñarme a risas de los silencios.
La vida se siente menos pesada cuando muero a carcajadas.
La vida es menos complicada cuando con sonrisas se disfraza.

La risa es la mejor medicina:
es antidepresivo y estimulante.
Reírse es de gente inteligente,
es el maquillaje que con todo combina.

Es tan fácil y además es gratis.
¿por qué nos cuesta tanto regalar sonrisas?
Hace sentir más feliz,
es improvisa, es única y precisa.

Y el cómico reía,
Y el público aplaudía.
Con humor rosa u sombrío,
creaba risas y aceptado se sentía.

¿Reír llorando o llorar de risa?
Es un reflejo espontáneo e inocente.
Me considero risueña de la vida,
dueña de minutos, siempre hilarante.
  
Pero también lloro y también sufro.
Sin embargo, río de mí y de lo más espantoso.
Es mi ilusión, mi coraza y mi sello:
¡Reír de nada. Reír de todo!

Me libera del temor y la ira.
Aplaca la angustia.
Es mejor cuando es contagiosa,
y se comparte y se conspira.

Así es la risa. Y la mía es escandalosa.
No es discreta ni malvada,
es más bien desesperada,
es toda una delicia.

Río sin miedo y con ganas.
Es un gesto que todo engrandece.
Mis risas no son vanas ni profanas,
son el alimento que a mi alma rejuvenece.



miércoles, 16 de octubre de 2013

Diferente...

"Déjame que me calle con el silencio tuyo...Déjame que te hable también con tu silencio.
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo." 
-Pablo Neruda-


Por Mireya Cerrillo.

A veces no comprendo esto que en mi mente pasa.
No entiendo este fuerte sentir en mi pecho.
No encuentro razones o motivos para este sentimiento,
es algo que simplemente me rebasa.

No encontrar las palabras… me descontrola.
Saberte así en silencio y lejano… me agobia.
No saber qué hacer ni qué decirte… me enloquece.
Y todo eso de alguna manera… me entristece.

¿Qué es esto que hacemos?
¿Cómo se llama esto que decimos?
¿Es amor? ¿O es un imposible deseo?
Sea lo que sea, será siempre un lindo recuerdo.
Sólo espero no sea un terrible juego.

No sé si pronto me desterrarás otra vez.
No sé si protegerme y enterrarte de una vez.
Lo que sé es que no se deja tan fácil de querer.
No es posible entender este ser y no ser.

Lo que me resulta más confuso
es la intensidad seguida por tus mutismos.
Lo que me parece desesperante
es no poder controlar tu humor siempre cambiante.

¿Y si nos queremos de una vez?… ¿Sí nos quisimos alguna vez?
¿Y si nos dejamos ser? ¿nos dejamos querer? 
¿nos dejamos sentir o nos dejamos ir?
No me queda más que el abrigo de esta fantasía,
Y como siempre, no me queda más qué hacer que escribir otra poesía.

Eres una profunda nostalgia,
una ausencia presente en mí.
Una promesa del tiempo,
la deuda de un beso sin fin.

Eres…tantas cosas eres,
que no consigo terminar de entenderte.
Soy… tantas cosas soy,
que te aterra reconocerme. 

Somos…tantas cosas -no- somos.
Que no concebimos un reencuentro.
Que no concretamos un adiós.
Que prometemos un “ya veremos”.
Que por favor, nos decida el tiempo.

¿Qué hacer? … sólo toca esperar.
¿Qué más decir cuando todo está dicho?
Una palabra basta para a mi mente calmar.
Una sonrisa tuya y sé que no eres un capricho.

A lo lejos mi voz te resuena.
En silencio, perdido y ausente
sé que mis miedos no son ciertos.
Recibo el relente de un beso
que me llena, me trema y todo es… diferente.


jueves, 10 de octubre de 2013

Periplo vehemente...

- Edel Juárez -

Por Mireya Certillo.

Quizás lo haces sin querer.
o tal vez es parte de tu naturaleza.
No sé si es tu manera de ser,
o es esto reflejo de tu incerteza.

Este ir y venir tuyo,
este constante viaje apasionado.
Acercarte y distanciarte es un periplo al que rehuyo,
es un éxodo temperamental de más sonado.

No me gusta vivir entre palabras increíbles
seguidas de tus largos silencios.
No puedo quererte a horarios flexibles,
no quiero sentir esto que siento.

Sé que es difícil la distancia.
Reconozco que quema la ausencia.
Sé que le debo al tiempo paciencia,
pues ansío tanto tu presencia.

Me duele que mi alma te reconozca.
¿Por qué tú sin hablarme ni tocarme
a mi corazón incendias y alocas
y en mí causas un desarme?

Me abruma encenderte
y me frustra no poder besarte.
Quisiera no anhelarte
y con una caricia aniquilarte.

Pero tú también vives en tormenta,
en desvelo y en delirio.
En miedo y en silencio
de no saberme aún tuya.

No sé qué me hace más daño:
la intensidad de tus encuentros,
o la soledad de tus huidas.
No sé si aferrarme a esta lejanía afligida
o intentar desterrarte en la barca del olvido.

Déjame entrar en tu vida,
Así con todo, así sin nada.
Quiero ser eso que anhelas,
la respuesta a lo que tu cuerpo ansía.

Pero el amor es incertidumbre.
Es arriesgarse. Es una constante pelea.
Es en mi pecho este fuego y pesadumbre,
y saberte ahí dentro aunque no te vea.

No sé si ya fue. Si es. O si seremos.
Lo que sé es que en esta claridad oscura,
no puedo tenerte así a ratos y a lo lejos.
Te quiero a tiempo completo con locura.

El problema no es el tiempo ni la distancia.
Es no sentirte cerca y que tu corazón me evada.
Es la falta de constancia,
lo que tiene a mi alma atada.

Como siempre, tú tienes las respuestas.
Como nunca, tú pones las reglas.
Yo vivo al día sintiéndome totalmente expuesta,
vulnerable y débil sólo quiero amarte sin premura.


martes, 8 de octubre de 2013

Los sabores dulces del buen amor: receta...

Mensaje a mi hermano y mi cuñada en el dia de su boda. 
(Fragmento)
Por Mireya Cerrillo.


La felicidad además requiere prepararse a fuego lento cada día. Por eso es que hoy y siempre les deseo que no falten nunca en su casa los siguientes ingredientes: esa pizca de admiración mutua para crecer juntos, que tengan muchas cucharadas de gestos románticos, una taza de compromiso diaria, 1 cubito de esfuerzo y 2 trozos de buena actitud, los abrazos son al gusto pero son indispensables para darle buen sabor a todo, nunca están de más. Deseo también que el amor siempre bendiga el pan de su hogar, y que no falte sazonar su nido con honestidad y generosidad.

El modo de preparación es simple: dos puñitos de responsabilidades compartidas, de nutrirse mutuamente y de cocinarse en las brasas del respeto y con la precaución y el cuidado que requiere lo sabroso: paciencia. No olviden condimentar todo con mucho cariño y aderezarlo con el gusto de saberse juntos.

miércoles, 2 de octubre de 2013

A tí te escribo...


"Hay que saber que no existe país sobre la tierra donde el amor no haya convertido a los amantes en poetas." Voltaire.
"Sor poeta no es una ambición mía, es mi manera de estar solo". Pessoa.

Por Mireya Cerrillo.

Le escribo a la nostalgia, a las ausencias y las tristezas.
Pocas veces escribo a las alegrías y a las presencias.
Hoy y siempre le escribo al amor y al desamor.
Escribo con mi pecho. Escribo con fervor.

Te escribo a ti aunque no me leas.
A ti, aunque poco me entiendas.
Dueño eres de mis letras,
Amo de mis incertezas.

Te escribo a ti aunque no sea en tu idioma,
a ti que pocas veces me notas.
Al amor que en mí provocas.
A la luz que en mi se asoma.

Quiero escribir de nosotros,
de nuestras bromas y nuestros miedos.
Decir lo que somos y no somos.
Indagar en nuestros sueños y profundos desvelos.

Voy a escribir a tiempo y a deshoras.
Con ambición y con soltura.
Escribiré con mesura cuánto me agobias.
Te haré saber todo sin censura.

No sé por qué tanto me inspiras.
Eres una dulce agonía.
Mi corazón te anhela y mi cuerpo te delira.
Eres la ilusión que a mi alma desvaría.

Fluyes en mis versos y emanas en mi prosa.
Escribo igual que antes. Escribo como nunca.
Gracias por ser esta inspiración dichosa,
y por completar esta historia aún trunca.

¡Qué regalo le hacemos al mundo amor mío!,
De ser esta loca sinfonía: de música y poesía.
De ser río y ser lluvia.
De ser uno y ser dos a pesar de la porfía.

No te pertenezco ni me perteneces.
Nos amamos con reservas y con promesas.
Somos la libertad de dos seres
que añoran el reencuentro, que buscan que el destino ya no sea sorpresa.

Así escribo. Esto soy: aprendiz de poeta.
Esto eres: maestro y poseedor de mi literatura breve.
Escribiré con ganas y sin treta,
Y firmaré lo que a mi pluma sólo tú mueves.